A veces te develas como una hermosa piedra blanca,
perfectamente tallada,
otras veces eres piedra gris centinela,
hoy eres el destello traslucido de verde, amarillo y azul,
saltando de un tono a otro sin patrón.
Para cuando dices fuego, siento mi cuerpo arder,
el rojo enciende toda la casa.
PanRodriguez // panindeleble.blogspot
Gracias por tu apoyo, me gusta que te guste mi poema....
ResponderEliminar